Libertarismo

Colombia es un país leguleyo en el que pululan las leyes para todas las cosas que no se pueden hacer.  Casi que la norma es tener una ley para cada paso que una persona o empresa pueda dar, lo cual siempre va acompañado de certificados y trámites notariales engorrosos. Sin embargo, en años recientes ha llegado al país una corriente política que puede estar por cambiar esa práctica leguleya: el libertarismo. Desde 2015 en Bogotá ha comenzado a escucharse con algo de fuerza sobre el libertarismo gracias al candidato a Alcalde, Daniel Raisbeck.

Pero ¿qué es el libertarismo? Una postura libertarista es, en general, la que aboga por un gobierno minimalista. Una frase que me parece que sintetiza bien el libertarismo es la que afirma que se trata de un partido político que es "conservador en temas económicos y liberal en temas individuales".  Tiene lo mejor de los dos mundos, de la derecha y de la izquierda.

Antes de conocer el libertarismo yo solía creer que la tecnocracia de los economistas, con la pureza de sus argumentos técnicos era la mejor manera de afrontar las decisiones de políticas públicas. He cambiado de opinión, y ahora considero que es mejor que los policy-makers sí tengan una posición política, porque luchar por estar libre de ideologías sólo conduce a la inacción. El libertarismo puede ser la fórmula para ofrecer unos criterios ad hoc para pensar políticamente sobre dilemas sociales.